7º-16º
lunes | 29 abril | 2024
El alcalde de Ribadumia ha denunciado ante la Justicia a un perfil anónimo de Facebook que desde hace un año viene satirizando su figura y gestión bajo el nombre de “David Vendido”. Para ello emplea la primera persona y fotomontajes de todo tipo. David Castro no quiso hacer declaraciones al respecto, pero según ha podido saber este medio, la Audiencia de Pontevedra ha ordenado practicar las diligencias necesarias para identificar a su creador o creadores, incluyendo dirigir un oficio a la sede internacional de Meta Platforms, propietaria de la red social.
Castro interpuso la denuncia el año pasado, tras meses de funcionamiento del perfil, pero el Juzgado de Instrucción número 2 de Vilagarcía decretó el sobreseimiento provisional de la causa “sin cuestionar la entidad penal de los hechos, por no existir motivos suficientes para atribuir su perpetración a persona alguna determinada”.
Así las cosas, recurrió la decisión ante la Audiencia de Pontevedra, alegando vulneración de la tutela judicial efectiva por no haberse practicado ninguna gestión para la investigación de los hechos, como corresponde a la fase de instrucción, según la Ley de Enjuciamiento Criminal para el esclarecimiento de todas las circunstancias que pudieran influir en su calificación delictiva, pues su defensa considera que pueden ser constitutivos de un delito de usurpación de estado civil. Este consiste en apropiarse de las cualidades de una persona utilizando su identidad y otros elementos propios de ella, simulando ser dicha persona en algún acto jurídico.
Entiende el alcalde que “David Vendido” está funcionando como un “perfil falso” que puede inducir a error, pues emplea una fotografía suya y realiza manifestaciones públicas no autorizadas por él, pero emitidas en primera persona “dando a entender que era él mismo quien las hacía, incluso utilizando vocabulario característico” suyo, lo cual se produjo además “durante la campaña a las elecciones municipales”, indicó en su recurso.
Ciertamente, el perfil, que tiene 453 seguidores, presenta esas cualidades, pero las imágenes están tratadas y adornadas con todo tipo de montajes presentando un aspecto muy alejado de la imagen institucional que correspondería al real de un personaje público como es un alcalde. Sus contenidos siguen la misma tendencia, no dejando a Castro en muy buen lugar en cuanto a su forma de ser y de gestionar el Concello.
El caso es que el tribunal provincial estimó su recurso y ha ordenado practicar las diligencias necesarias “tendentes a determinar la identidad de la persona” que lo ha creado, la cual “realiza los anuncios denunciados” y presentados por Castro como prueba. Así, revoca la decisión del juzgado vilagarciano y ordena practicar las diligencias precisas “a fin de acreditar la autoría de los hechos, dictando posteriormente la resolución que proceda”.
No es la primera vez que el mandatario de Ribadumia vive un caso similar. En mayo del año pasado, en plena campaña de las municipales, denunció ante la Guardia Civil varios perfiles en diferentes redes sociales señalando que vertían graves acusaciones contra él, así como unos carteles con un fotomontaje donde aparecía con una mujer y que aparecieron en las calles y en parabrisas de vehículos.
